Fausto Francisco Capellán Guillén, quien fue muerto a tiros por un compañero penitenciario en el interior de la fortaleza Juan Pablo Duarte de San Francisco de Macorís, envió varias notas de voz a sus familiares para denunciar que los reos estaban siendo atracados por otro grupo.
Según comunicó la víctima a sus parientes, sus atacantes primero lo despojaron de joyas de oro valoradas en RD$500 mil y de RD$600 mil en efectivo.
Nicole Cepeda, quien se identificó como una de los ocho hijos de la víctima, aseguró que esos bienes corresponden a un negocio de préstamo que tenía su padre en ese centro carcelario.
«Mi papá solo trabajaba y prestaba sus chelitos ahí dentro», declaró la mujer de 26 años. En uno de los audios, a los que Diario Libre informa que tuvo acceso, Capellán Guillén dice: «Esa gente está rompiendo las puertas y atracando a todo el mundo».
En otro se escucha a los homicidas decir: «Rompe la puerta que no me voy sin matar a ese …». También se escucha mientras golpean un metal.
En los audios uno de los victimarios amenazaba con empezar a quemar a los reclusos que ocupaban una de las celdas para que le abrieran el candado.
En la nota de voz se oye el momento cuando realizan varios disparos.
Por el homicidio de Fausto Francisco Capellán Guillén, condenado a 30 años de prisión por secuestro, es imputado Jesús Manuel Doli de la Cruz (Manuelcito), condenado a 20 años por homicidio.
Luego del hecho, el homicida y sus acompañantes se atrincheraron en una celda utilizando como rehenes a varios reclusos.
