En la República Dominicana, la libertad de expresión y de información es un derecho fundamental garantizado por el artículo 49 de la Constitución. Este derecho permite a las personas expresar sus pensamientos, ideas y opiniones sin temor a represalias o censura por parte del Estado, particulares u otras entidades. La Constitución establece claramente: “Toda persona tiene derecho a expresar libremente sus pensamientos, ideas y opiniones, por cualquier medio, sin que pueda establecerse censura previa”.

La censura previa se refiere a cualquier medida que impida la difusión de una información o expresión antes de que ocurra, lo cual contradice la libertad de expresión por varias razones:

  1. Restricción a la Libertad de Información

La censura previa impide que la información llegue al público, limitando el acceso a diversas perspectivas y opiniones. En una democracia, el intercambio libre y abierto de ideas es esencial para que los ciudadanos tomen decisiones informadas. Sin acceso a una variedad de fuentes y puntos de vista, la capacidad de las personas para formar su propia opinión se ve gravemente restringida, lo cual es vital para el funcionamiento de una democracia genuina.

  1. Impacto en el Debate Público

La censura previa crea un ambiente de autocensura entre los comunicadores y medios de comunicación, quienes pueden evitar ciertos temas por temor a represalias. Esto restringe el debate público y la capacidad de la sociedad para abordar y resolver problemas importantes. La autocensura disminuye la calidad del discurso público, privando a la sociedad de la oportunidad de enfrentar desafíos de manera abierta y honesta.

  1. Violación de Derechos Fundamentales

La prohibición de la censura previa está en línea con tratados y convenciones internacionales sobre derechos humanos, como el artículo 19 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP) y el artículo 13 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos (CADH). Ambos instrumentos refuerzan la protección de la libertad de expresión y el derecho a recibir y difundir información sin interferencias. La censura previa no solo viola los derechos individuales, sino que también socava los principios fundamentales sobre los cuales se basan estas convenciones.

  1. Función de Contrapeso

La libertad de expresión actúa como un contrapeso frente al poder del Estado y los particulares, permitiendo las críticas, denuncias de abusos y corrupción. La censura previa debilita este trípode, favoreciendo la opacidad y la falta de responsabilidad. Sin una prensa libre y sin restricciones, los abusos de poder pueden quedar sin ser denunciados y corregidos, perpetuando la injusticia y la corrupción.

  1. Necesidad para el Desarrollo y Progreso Social

En una democracia saludable, la libertad de expresión no es solo un derecho, sino una necesidad para el desarrollo y el progreso social. La censura previa es comparable a colocar una barrera frente a la ventana del conocimiento y la verdad. Si no se permite que las ideas fluyan libremente, la sociedad queda atrapada en la oscuridad de la ignorancia y la desinformación.

En conclusión, la censura previa representa una amenaza significativa a la libertad de expresión y, por ende, a la democracia. Es esencial mantener la prohibición de esta práctica para garantizar que los ciudadanos puedan acceder a la información y participar plenamente en el debate público, promoviendo así una sociedad más justa y transparente.

VisionNoticiasDigital.com
¡Conecta con nosotros!

Difúndalo en: